martes, 5 de abril de 2011

Quien era el poeta alfarero?

Febrero 1941

El poeta-alfarero, Lisardo Aparicio Jiménez nació en el pueblo de Bercimuelle (Salamanca) de una familia humilde en Agosto de 1922. Su abuela materna pertenecía a una familia de letras (un hermano y una hermana habían sido maestros escolares)y a ello era debido que en la casa había libros, que de niño ya aprendió a leer e hicieron nacer en él la afición a la poesía que se vió incrementada años mas tarde ya en su juventud. A los 9 años quedo huérfano de madre y por ello vivieron con su padre y sus abuelos  maternos.
Una de las poesías narra la tarde que allá en el cementerio escribió sobre aquella madre que les abandonó tan pronto. En su juventud tuvo ardientes y apasionados amores platónicos que quedaron bien plasmados en sus poesías.
La Guerra Civil del 36 al 39 y aquél ambiente que crearon las fuerzas de la España azul que luchaban contra la España roja propiciaron también varias poesías donde quedó bien patente el patriotismo de que estaban imbuídos la mayoría de los que estábamos en la llamada España nacional.
Al finalizar para él la escuela, que entonces era cuando se cumplían los 14 años, día 6 de julio del 36 en los albores de la guerra acudió con otros dos compañeros de  clase a un pueblo cercano donde se celebraron
los primeros exámenes  de estudios primarios .Obtuvo el certificado que le hubiese valido para poder estudiar, pero la guerra desvió aquello por el camino de siempre, sólo estudiaba el que tenía dinero aunque no tuviera vocación por las letras.
Así pues en vez de estudiar, tuvo que  aprender el oficio de la alfarería, para en aquellos difíciles tiempos de la guerra y la posguerra poder subsistir así trabajando y leyendo lo que podía pasaron aquellos años negros.
A partir de los 20 años fue cuando empezó a escribir sus versos, cuando aquel primer amor que sintió tan profundamente en el alma , hizo surgir en él aquella poesía tan lírica y tan romántica así siguió siempre, como un romántico impenitente, leyendo cuanto podía de aquellos clásicos de antes y de después del Siglo de Oro de nuestra literatura y de otros, si tenía la suerte de que cualquier obra cayera en sus manos.

Lisardo  Aparicio Jiménez

De su propio puño y letra.